About 120 children were killed daily at Auschwitz
About 120 children are killed every day by ISRAEL Stop WAR CRIMES and GENOCIDE Su fuente de semillas...
| ||
11 de octubre de 2009
Reflexiones y sentido común. Colaboremos con la preservación de nuestro medio ambiente.
La conservación del medio ambiente ya es una de las preocupaciones principales de países desarrollados, organizaciones no gubernamentales, fundaciones ecologistas y diversas entidades en el mundo entero. La razón es sencilla y radica en la importancia de valores fundamentales como el que no podemos sobrevivir sin nuestro medio ambiente, pero este si lo puede hacer sin nosotros, los humanos. Si bien esta frase es radical, proyectada hacia el futuro no puede describir mejor la realidad venidera. Cada organismo vivo es parte de nuestra biodiversidad y le tomo millones de años convertirse en lo que es actualmente. Sus utilidades pueden ser tan variadas como lo es la alimentación, la farmacopea, la conservación de los equilibrios eco sistémicos, apegamientos sentimentales, entre otros.
Alerce chileno uno de 24 árboles chilenos en peligro de extinción.
El daño producido por la falta de respeto hacia nuestro medio lo podemos observar en una infinidad de ejemplos prácticos como la introducción de la chaqueta amarilla, la cual prometía alimentarse del tábano autóctono y luego pasó a peligrar la supervivencia de fauna clave para la conservación de nuestra flora local. Otros animales introducidos como el jabalí o el ciervo colorado amenazan la supervivencia del Huemul que subsistió de manera armónica con nuestra flora durante miles de años. La trucha arco iris proveniente de América del norte no provoco más que grandes desequilibrios en nuestros sistemas acuáticos y así sucesivamente.
El Huemul. Representante de la exclusividad de ecosistemas autóctonos.
Para comprender mejor al párrafo anterior mencionaremos un ejemplo causado por la Rusia soviética de los años 60 donde los agricultores del algodón tomaron tanta agua del mar de Aral para irrigar sus cultivos que este se salinizo y luego se seco casi por completo. Recordemos que en los años 50 este alimentaba a grandes ciudades con recursos pesqueros; demás esta decir que contenía una gran biodiversidad animal y vegetal como lo hace todo ecosistema intacto. Esta pérdida gradual de agua no provoco más que un hábitat ideal para la reproducción de langostas que debido al cataclismo ambiental no encontraron competidores en sus nichos ecológicos y como es de suponerse comenzaron a alimentarse de las plantaciones de algodón en proporciones indescriptibles. El humano quizás en parte por ignorancia comenzó a empeorar la situación mediante el uso de insecticidas que una vez arrastrados por las lluvias a sus cursos de agua y suelos, aun hoy en día tienen efectos, cancerígenos, teratogenicos y mutagénicos en las poblaciones humanas que habitan allí. Este caso pone en evidencia los efectos de la ausencia de un estudio de impacto ambiental acorde a la hora de crear un programa de desarrollo agrícola. Y en post mortum de mencionado ambiente podríamos decir que si tan solo se hubiesen conservado los limites de extracción de recursos naturales en niveles tales que la recomposición natural diera abasto, todo esto, nunca hubiese ocurrido.
Imagen satelital del Mar de Aral en 1985 y 2003. Sin comentario.
Ahora bien, es comprensible que la creciente población humana necesita ampliar sus ecosistemas antropicos, como lo son las ciudades y los campos agrícolas. Sin embargo esto último no quiere decir que la agricultura actual, con sus semillas transgénicas y agroquímicos poderosos sea la única manera de alimentar nuestras necesidades y lujos de manera eficiente y económicamente rentable. En el Brasil, Kenia y en otros países existen diversos intentos de implementación de un sistema agrícola llamado agrofloresta. Este método consiste en el intercalado de especies cotidianas de valor comercial en la naturaleza existente. Las ventajas de estas permaculturas llamadas agro florestas se encuentran en la casi nula aplicación de agroquímicos, la conservación de la biodiversidad en casi su totalidad, la obtención de un producto comercial principal sano y la ventaja de obtener posibles productos secundarios mediante el manejo consiente del ecosistema original que conservamos allí.
Recuperación de selva y proyecto de producción mediante el sistema de agroflorestas en Curupira Brasil.
Otro ejemplo clásico es el cafetal en América central. Empresas multinacionales como Monsanto y Syngenta utilizan estrategias comerciales habilidosas para vender paquetes de semillas alteradas genéticamente y agroquímicos que prometen aumentar la producción de un cafetal mediante la conversión de un sistema orgánico a uno industrial en una relación de 4 a 1. Sin embargo esto, en la práctica, quiere decir que el antiguo productor orgánico pierde dinero. Lo hace porque el sistema moderno requiere de la compra de un paquete químico con las respectivas semillas de alto costo cuyos proveedores son muy pocos, porque ya no tiene una cosecha de café de mayor valor comercial, ni productos secundarios como madera, frutas y otros cultivos útiles que durante los siglos pasados se acostumbraba cultivar de esta manera.
Ejemplo de Argofloresta cuyo cultivo principal es el café.
Finalmente podemos afirmar que la conservación parcial de la flora, fauna y diversidad ecosistémica es una necesidad vital para la permanencia de la civilización humana en nuestro planeta, al menos, tal como la conocemos.
Autor: Schaub Roger. Analista en Impacto ambiental.
Mensaje del autor:
Estimados lectores. Simplemente participo por amor al arte y quizás me envíen unas semillas de cestrum parqui o algún otro árbol autóctono. Desde ya sé que se excluye la participación de extranjeros sin embargo y como lo dije anteriormente participo debido a mi amor al arte y al medio ambiente en general.